Entre el martes y miércoles de la presente semana, el fútbol asistió a las semifinales de la Eurocopa y de la Copa América. En el Viejo Continente, cual si estuviésemos en tiempos de sacros imperios, ingleses y españoles se verán las caras en Berlín para dirimir el título. Y tal como se lo preguntara Sergio Levinky, periodista argentino, ¿podrá vencer la Armada Invencible? Es muy probable, pero al frente estarán las tropas de Su Majestad. Lindo partido que seguramente se decidirá por detalles.
Inglaterra llegó en el segundo turno a la hora decisiva. Derrotó in extremis a Holanda 2-1, tras un gran PT, a todo vapor. Y lo hizo remontando tras el gol inicial de los Tulipanes, tanto que produjo la inmediata reacción británica y con ella, el penal que Kane transformó en el 1-1. Y tras ello, vinieron posiblemente los mejores minutos de los 3 Leones en el torneo. En el ST, de nuevo bajó el ritmo y Holanda pretendió jugar como en el duelo de primera fase contra Francia, esperando atrás. Inglaterra no tuvo claridad y solamente al filo del epílogo del tiempo regular logró el gol de la clasificación, como justamente Holanda en la semifinal de 1988. Los cambios esta vez le funcionaron a Southgate, quien incluso se atrevió a volver a sacar a Kane en otra arriesgada decisión. Siguen adelante los ingleses, sin haber redondeado un partido completo y sin llenar la retina. Pero le rinde a Southgate, con su segunda final de Euro al hilo (las únicas de Inglaterra en su historia), además de las
semifinales de Rusia 2018 (primeras en 28 años) y de Nations League 2019, esta última también ante Holanda. Y por si fuera poco no ha perdido en 13 partidos dirigidos por Euro en 2021 y 2024. Si esto lo consigue con infinidad de críticas que lo tildan de que no sabe, cómo sería si supiera? Creo que independiente de lo que pase el domingo, los resultados lo siguen avalando. Eso sí, Inglaterra sigue debiendo su gran partido, más con la nómina que posee. Veremos si lo consigue en la tarde del 14 de julio.
Su rival, llegó a la final en el turno del martes. Aquel día, La Madre Patria despejó las dudas sobre si era el mejor equipo del torneo (independiente del juego de Berlín), refrendando ese calificativo con un claro triunfo 2-1 frente a la calculadora Francia de Deschamps, que dejó Alemania con más pena que gloria. Les Bleus arrancaron ganando muy temprano y ese gol hizo presagiar un buen futuro para Francia, dada su solidez defensiva. Pero llegó un gol brillante de un niño de casi 17 años (justamente cumplidos hoy julio 13) llamado Lamine Yamal, quien tuvo un partido consagratorio. Ese gol era el empate temporal, pero sentenció el partido, pues rescató a una España había arrancado mal. Francia lo sintió y 5 minutos después, los españoles obtuvieron el 2-1 definitivo. Corrían solamente 25 minutos del PT. Los franceses sin jugar mal, lo intentaron en los 65 minutos restantes, pero España tuvo el control mental y posicional del juego y llegó a su quinta final de Euro con total autoridad,
6 triunfos, derrotando en el grupo a Croacia e Italia y eliminando a dos favoritos como Alemania y Francia. Ciclo que sigue viento en popa de la mano de Luis de La Fuente, bombardeado en su nombramiento. Ya tiene una Nations League y va por la Euro. El futuro le sonríe, juega con dos extremos, usa todo el ancho de la cancha, recuperó el juego de posesión de la época dorada de Aragonés y Del Bosque, pero ahora con mayor ritmo, y el domingo va por la gloria. Lo merecen por lo visto hasta ahora. De la mano de aquel niño cargado por Messi por allá en 2007, imagen inmortalizada en una foto de Joan Monfort, que se volvió histórica.
Y Yamal lo logra, justo en el mismo día en que Lionel Messi, el muchacho de 20 años de aquella foto, ahora con 37 y un título del mundo a cuestas, lograba clasificar a su quinta final de Copa América, la sexta de su selección en las últimas 8 versiones del torneo, en un partido contra Canadá sin mayores afugias, en el que también como el bebé de la foto, anotó un gol. La foto de los dos, tomada en diciembre de 2007, llegó a su clímax en julio de 2024. Así es el fútbol. Y mañana, en la tarde del domingo en Berlín, España e Inglaterra se verán las caras. Como en los cuartos de final de 1996, con empate, penales y Southgate en el viejo Wembley o como en la final del Mundial Sub 17 de 2017 con Foden y Ferran Torres en escena. Aquella vez en India, ganaron los ingleses 5-2, pero nada presagia un marcador similar. España espera redondear la proeza de ganar la corona, lograr tener los dos títulos continentales junto a la Nations League actual, y además vencer a todos los cuatro campeones
mundiales europeos restantes en el mismo torneo. Lamine Yamal en aquella final, solamente tenía 10 años. Ahora tras protagonizar la “foto de los dos” con Messi, espera estar en otra foto. La foto de la cuarta. Veremos si lo logra. Con Berlín de testigo.
Germán E. Ocampo
Davie, FL, julio 13 de 2024 |