Como nací en el 72, el siguiente mundial fue el
de Alemania 1974; y de ese no recuerdo absolutamente nada, ni más faltaba.
EL VERDADERO PRIMERO
De Argentina 78 evoco claramente dos cosas: el partido final y el RCA traído de
Miami como el centro de atención de mis papas, sus amigos y nosotros los niños.
¡Imagínense! El programa social de fin de semana en casa de los Vidal, reunidos
todos en la sala alrededor de (probablemente) uno de los primeros “TV a Full
Color”, cuando aun la TV colombiana era en blanco y negro. Como olvidar esos
colores apreciados por primera vez en la pantalla: aquel esplendoroso naranja de
los holandeses, el brillante verde del pasto bonaerense salpicado de miles de
blancos e intermitentes papelitos ó la camiseta a rayas celestes de Kempes y su
gol.
Yo oía casi todos los días un disco que me compró mi mama con la siguiente
canción: “Sport Billy… tu nos tienes que salvar… Sport Billy… a la humanidad…Envidina
“no se que” (ta, na, na) a Sport Billy”.
EL SEGUNDO
Panini llego a mi vida junto con Naranjito en España 82. Me agrada recordar
cuando intercambiaba vistas (para los no-caleños: monas, cromos, láminas) con
mis compañeros en los recreos del colegio. Aprendí a preparar la lista de las
repetidas en una hoja de cuaderno, aunque realmente pocas veces la necesité,
pues casi siempre sabía de memoria la cara de los jugadores que ya estaban
pegados a mi álbum (¿o sería nuestro álbum?: el de Tavo y mío, Diego muy
polluelo). Vienen a mi memoria el “Buitre” Emilio, los porterazos Thomas N´Kono
y Dino Zoff y por supuesto Brasil con Sócrates, Falcao, Zico y su “hoja seca”.
Si vieran mi felicidad una vez que fui caminando hasta Unicentro a comprar
paquetes de vistas y me salio una con un jugador español que se llamaba “Juanito”.
Pero escarbando más al fondo de mi nostalgia infantil, recuerdo el programa de
TV de Naranjito, en el que a diario me zambullía junto con sus compañeros en
diversas aventuras a lo largo y ancho de la península ibérica.
EL TERCERO
Para 1986 yo tenía 14 años y demasiado “ajicie” o fiebre por los deportes hasta
el punto que habré dejado de ver algunos partidos de México 86 por estar
haciendo nuestro triatlón “inventado” por Federico, Tavo, Diego y yo (all pito
members): vueltas a la manzana en bici, seguidas de trotar alrededor de la
piscina y rematar con circuito a nado (Club Cañasgordas).
Esas mismas tardes, al llegar a casa mamado de hacer triatlón, supongo que a eso
de las 4pm, ya recién bañado y con el estomago lleno… a acostarse en la cama y a
ver a Maradona.
¡Que envidia!... ojala hoy pudiera vivir así un mundial.
Con México aparece la maravillosa ola mundialista protagonizada por la hinchada
en las tribunas. ¡Que maravilla! Tampoco me olvido de la carátula del álbum
Panini con el dibujo de un tipo haciendo una chilena… ese lo forramos con
contact y aun lo tengo en la casa de mi mama en Cali, junto con el de España 82
(sin repetidas sueltas, bonovox).
¡Ahh memorias!: como no existían los controles remoto con “jump” ó con
“flashback” ni tampoco TV´s con “ventanita anexa”, yo ponía 2 televisores juntos
para ver aquellos partiditos que desafortunadamente iban en simultanea.
EL CUARTO
Italia 90 fue el que más pasión levantó en mí, talvez porque fue donde mejor nos
ha ido a Colombia. Fue aquel mundial donde se presentó el gol que mas he gritado
en mi vida, el de Rincón.
Uno de esos días de junio de 1990, por andar volteando en la calle dizque
comprando el pantalón para mi grado de bachiller, me lamentaba de tener que
escuchar no se cual partido en el radio del carro. Después de la euforia de
empatarle a Alemania y pasar a segunda ronda, y un día antes de presentar el
ICFES vi como Higuita le entregaba el balón y la eliminación a R. Milla.
EL QUINTO
Sosamente en 1994 se realizó este torneo en USA, donde nunca hubo cultura ni
entendimiento de fútbol. Pues si… era cerquita y uno como colombiano a 3 horas
de distancia podía aspirar a verlo en un estadio, pero nunca me pareció adecuado
el sitio escogido por FIFA.
En aquel entonces pude ver varios de los partidos y no perderme tantos (como lo
será actualmente en Alemania), pues en la universidad pude sacar todo el tiempo
necesario para hacerlo. Si Tavo lo permite, diré que con USA 94 él introdujo la
polla-germen que luego configuraría El Pito. O sino acuérdense de la hoja
electrónica pegada con cinta en la puerta de madera del cuarto de mis hermanos,
donde en letras de impresión de Excel estaban los nombres de los participantes y
diariamente escribíamos los pronósticos con Kilométrico de colores diversos: uno
en rojo para quienes no acertaban y en verde para los ganadores.
Bueno… y toca decirlo, los colombianos teníamos puestas tantas esperanzas que no
llegaron a ser realidad… al contrario, se tornaron en desdicha. Y ni que decir
de la final definida por tiros penalti. ¡Que chimbada!
EL SEXTO
En junio de 1998 era para mí un hecho estar trabajando, mientras en Francia
actuaban Yepez, Valderrama, Mondragón y demás. No tuve espacios libres para ver
toda la cantidad de partidos que hubiera querido, aun cuando en la oficina
encontramos la forma de instalar un TV en la sala de reuniones y así disfrutar
de los encuentros especiales y definitivos, entre semana.
Desde hacía 2 años había pre-pagado a la Promotora de Turismo de Belisario
Marín, en cuotas mensuales, el tour por Europa con boletas incluidas para seguir
a Colombia durante la Fase 1. Talvez con un mejor desempeño de Colombia lo
hubiera lamentado; pero, la verdad, no me arrepiento de haber cambiado todo el
ahorro pre-pagado por un Mazda 323 Coupe (mi primer carro). Al final, tras mi
elección, vi por TV como el inglés Seaman consolaba a Faryd.
EL SÉPTIMO
Difícil aceptar de nuevo el dejar de ver muchos partidos de Korea-Japón. Uno
siempre quiere ver el 100%, pero en esta ocasión además de las obligaciones
laborales ya era responsable por mi hijo Nico que en junio de 2002 tenía 20
meses.
Sin embargo, con todo y el gran beneficio de poder ver partidos a la madrugada,
pedí vacaciones para degustarlo en paz. De nuevo a FIFA se le ocurre inventar
vainas raras como tener dos sedes; aunque estimular de esa manera a Asia creo
que fue acertado.
Por segunda vez en la historia de la humanidad Brasil es el único país en ganar
la Copa Mundo por fuera de su propio continente. Me da orgullo.
EL ACTUAL
OK, para este van vistos 7 partidos. Los horarios están tenaces. Lo bueno para
quienes estamos en Colombia es que hay por allí tres lunes festivos engarzados,
¡lo cual va a ayudar mucho en el goce y el disfrute! Es muy desafiante y muy
agradable lograr jugar con mis dos hijos + mi esposa + ver los tres partidos
Alemania 2006 del domingo + la final de Roland Garros + ¡ver al DeporCali
despuntar en la final colombiana!
Juan Felipe Vidal
Bogotá, junio 11 de 2006 |